11 de mayo de 2010

Gran éxito en la primera iniciativa de la Obra Social El Mejillón Suicida


La primera cita cultural apadrinada por la prestigiosa y recién estrenada Obra Social de El Mejillón Suicida fue todo un éxito, como demuestra la gran afluencia de público asistente a los varios actos convocados durante los pasados 8 y 9 de mayo.

El fin de semana empezó con una propuesta intimista de Moon Dos y Raquel Sánchez, que improvisaron una pieza en nuestro salón ante los ojos siempre expertos y atentos de los mejillones, que pudieron esparcirse en las bonitas baldosas a falta de compañía humana. De este momento, además de los rutilantes juegos de luces de la bailarina Raquel Sánchez con nuestra doble ventana, que amagó con desprenderse de sus bisagras, nos queda además la melodía de un timbre que apagó su voz, merced a la insistente delicadeza de la artista.

La mañana continuó con Playtime Audiovisuales, que iba a ofrecer una proyección de varias video-piezas tan rompedoras que ni su propio promotor vino a verlas. Poco después tomaba el relevo Se nos cae, títeres con pelos en el coño que ofrecieron una versión de La Casa de Bernarda Alba, delicadamente amenizada por un repique se campana sin parangón a cargo de este molusco que escribe, que además se hizo cargo de subir el volumen de la música y luego bajarlo, con gran éxito y precisión.

Más tarde, Maricruz Planchuelo nos enseñó las tetas en el hall del cuarto piso mientras Artur Vidal hacía sonidos gástricos con su saxo (que no con su sexo). Fuentes bien informadas confirman que cuatro murcianos abandonaron la sala horrorizados, si bien el resto del público congregado aplaudió esta pieza con entrega.

El plato fuerte del sábado estaba por llegar, y llegó un poco tarde. Luis Brea, directo al corazón desde San José de Valderas, nos contó a la guitarra cómo le va a un viejo amigo que se mudó a Campodón. Luego, GG Quintanilla llenó la habitación con su vozarrón y, aunque no se le entendían las letras, cosechó aplausos del entregado público. Fue Ginferno quien levantó de las alfombras (el viernes, suaves y agradables, hoy sucios guiñapos) a un selecto público que dio botes en nuestro salón. Hubo saltos y gatitos: el prestigioso fotógrafo Olmo González seleccionó para la ocasión un pase de diapositivas de gatitos, directamente cocinadas en flickr. Hasta Kim emitió algún maullido. Para el que no lo sepa, Kim es el cantante de Ginferno, que, además de un experto en hacerse el sueco, es fan declarado de Camela, de quienes obtiene la inspiración para sus temas de amor.

Así las cosas, la gente desapareció del salón como por arte de magia mientras los mejillones fregábamos suelos y vasos y recogíamos colillas de los balcones.

El domingo, Planchuelo y Vidal abrieron la programación con su interpretación del movimiento corporal interno, de nuevo en el hall. Poco después, un listillo nos despertaba de la siesta a las tres de la tarde, ansioso por llegar a la proyección de Playtime que, esta vez sí, tuvo su público.

De nuevo, los títeres congregaron a un nutrido grupo de espectadores, más nutrido aún para ver a Moon Dos y Raquel. De ellos, lo mejor que se ha dicho ha salido de la boca de Jorge (ocho años): “es muy raro” (gracias Jorge, alguien tenía que decirlo sin eufemismos). Esta vez, a falta de un timbre que romper, Raquel prefirió tomarla con una espectadora, a quien arrancó una de sus botas para, poco después, arrojársela al público mientras les gritaba.

Por la noche, el concierto de Tenedor y Miedo deparaba una sorpresa: a Tenedor y a Miedo se les suma Bea, que hace algunas percusiones, la más sonada con un xilofón. Bea domina, al menos, dos notas, y encima toca la flauta.


De este modo, la Obra Social El Mejillón Suicida comienza con un éxito sin parangón su bagaje en la promoción cultural, apostando por la innovación y aprovechándose de artistas emergentes que algún día serán ricos y habrán firmado un contrato con nosotros y entonces les exigiremos los royalties correspondientes y por fin saldremos de este agujero y dejaremos este blog y no nos veréis mas los filamentos ni nuestras conchas nacaradas. Se trata de una nueva vía de negocio abierta por El Mejillón Suicida, que consolida así su implantación en el mercado.

El equipo directivo del grupo iniciará en breve otras acciones como, por ejemplo, las Becas a la Creación, ya que las pegatinas nunca nos dieron ni un duro.

3 comentarios:

jesús miguel dijo...

Gracias Olmo and Pat. Wel love you so much!

T&M

Unos de los murcianos dijo...

En realidad los murcianos fueron por hacerte un favor porque por la mañana no había ido nadie. El espectáculo estuvo bien, es una pena que te agradezcan la visita de esta forma.

Anónimo dijo...

acho pijo cómo son los murcianos! los mejillones no agradecen sino que han de ser agradecidos. esperamos resctificación o las hordas de fans del mejillón se lo harán pagar. PAELLA O MUERTE!